Kässpätzle

En Alemania, concretamente en Suavia, hacen tradicionalmente una pasta conocida como Spätzle o Spatzeln que es muy consumida también en toda Baviera.

Los Spätzle se parecen a cualquier otro tipo de pasta en su composición, básicamente: Harina (a veces también harina de sémola), huevo, agua y sal. La diferencia es que la masa es bastante blanda y las formas que se hacen con ella salen como muy irregulares, se hacen unos churritos finos y muy largos (como con la plastilina) y se van cortando fideos y echándolos en agua hirviendo. Los Spätzle sirven frecuentemente como acompañamiento para carnes. Los más sofisticados llevan espinaca en la masa o puré de mazana para hacer posteriormente platos dulces.

Pero el plato más popular son los Kässpätzle o Spätzle con queso, un plato muy socorrido para cuando se va con niños a un restaurante típico (casi siempre hay en la carta) e increíblemente fácil de hacer en casa en uno de esos días que no hay ganas de cocinar pero sí mucha, mucha, mucha hambre.

Ingredientes: 

Spätzle pre-cocidos

Queso Emmental rallado

Cebollita frita

(Las tres cosas se pueden comprar empaquetadas en el súper)

Jamón cocido o bacon (opcional)

Se ponen todos los ingredientes juntos y se pueden hacer en una fuente en el horno o en una sartén.

A mí me recuerdan a los Macaroni 'n Cheese que una americana con la que compartí piso comía día sí y día también. Quizás no sea el plato más nutritivo para un niño.

A nosotros nos gusta cocinar, lo hacemos bien y nuestros platos están llenos de vitaminas, pero cuando no tenemos ganas de hacer nada, en lugar de irnos a un McDonald's preparamos una tonelada de Kässpätzle y en la fuente no quedan ni las miguillas. Probadlos y ya me contáis.